Esta semana se conoció una gran noticia para la salud pública de San Miguel. Es que, tras hacer un exhaustivo estudio en los últimos años, se confirmó que la mortalidad neonatal en el Hospital Larcade bajó un 53% del 2023 al 2024.
Según revelaron las autoridades, la estadística descendió a 3,79 por cada mil bebés nacidos vivos, siendo uno de los índices más bajos de todo el país.
Este número, que viene bajando año tras año, logró en 2024 su mínimo histórico en el distrito, gracias a las políticas de maternidad y primera infancia que lleva adelante el municipio.
Se trata de iniciativas como el Programa de Prevención del Parto Prematuro, el Camino de la Embarazada y Mil Días, entre otras, que acompañan a mujeres embarazadas y sus bebés desde la concepción. Además de los cuidados obstétricos que se llevan adelante en el primer y segundo nivel de atención que ayudan a seguir descendiendo los índices de mortalidad neonatal.
El intendente Jaime Méndez visitó estos días al equipo de Neonatología y los felicitó por su gran trabajo y vocación. Junto al secretario de Salud, Luis Costán, recorrieron las instalaciones y conversaron con el personal del hospital.
Cabe recordar que el área de Neonatología del Hospital Larcade cuenta con 20 plazas de terapia intensiva para recién nacidos, donde se reciben prematuros de alto riesgo y pacientes complejos. Allí también se promueve la lactancia materna, y el contacto piel con piel. Cuenta con equipamiento y especialistas que fortalecen el cuidado y la atención de los recién nacidos.
